12/5/10

La niña de los lentes raros.



No me considero una mujer extravagante, aunque a veces peco de ello, pero si me ha gustado ser el centro de atención y que por lo menos si alguien alguna vez me ve en la calle y luego tiempo después vuelve a suceder me recuerde por una característica en particular.

Me gusta la moda rara, esa que no te pondrías para salir un día normal, fue así que me dediqué el año pasado a buscar un par de lentes que me hicieran ver lo suficientemente rara como para alejar de mi esos comentarios de los tipos que no tienen nada bueno que hacer por su vida y que las tipas que se creen mejor que nadie, me miren más raro pero con cierto respeto por atreverme a usar algo fuera de lo común.

Los encontré casi por casualidad en una tienda, allí casi brillando, con una luz única y dije, estos son. Luego de acoplarlos a la medida de mi miopía, me lancé a la calle sin siquiera verme antes al espejo, con la plena seguridad de que me verían raro.

Un día de la nada aparecieron con una pata quebrada, me entristecí y lloré internamente como una niña de 3 años a la que le quitan su juguete favorito. Los deje guardados, como si les estuviera rindiendo una sepultura casi real. Llegaron otros marcos pero no me hicieron tan feliz como aquellos.

Hace unos días tuve la idea, me los volveré a poner, como sea pero tengo que volverlos a usar!... y así fue, cogí una goma de secado rápido y los uní, junte esa parte que había quedado separada de el marco y me los puse.

La perspectiva de mi vida y como veo que la gente me observa con ellos me encanta, es como si siempre interpretara un personaje que no pretende ser inteligente ni una freak, simplemente un ser normal con un plus raro. En la calle la gente murmura, se rie, hace gestos raros y unos que otros patanes sueltan sus palabras fuera de contexto, ah y sobre todo me miran con esa cara de bicho raro, como si fuera una loca, como si fuera un alien, y saben que? Me gusta, porque sabes que no eres un ser que pasará desapercibido, que empiezas a crear un personaje que los simples transeúntes recordarán, quizá en alguno evoque el comentario en otro y cuando me vean dirán... ella es.

Despues de todo la vida es algo excentrica y si le puedes agregar algo, porque no?

Ahora mis lentes y yo, somos de nuevo felices.

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